Leonor Varas: “No hay excelencia si no hay diversidad”
La directora del DEMRE de la Universidad de Chile fue una de las invitadas a un conversatorio organizado por la senadora y ex ministra de Educación, Yasna Provoste, para aclarar dudas sobre la Prueba de Transición y el Proceso de Admisión 2021. Destacó los cambios en el sistema de admisión que persiguen una mayor justicia y diversidad entre quienes ingresan a la educación superior.
El viernes recién pasado, la directora del Departamento de Evaluación, Medición y Registro Educacional (DEMRE) de la Universidad de Chile, Leonor Varas, participó en un conversatorio vía Zoom organizado por la senadora de la Región de Atacama y ex Ministra de Educación, Yasna Provoste.
El encuentro, presenciado por un centenar de estudiantes, académicos, apoderados y autoridades educacionales de Atacama, sirvió para que la autoridad de DEMRE -quien compartió panel con el presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar; el académico de la USACH, Francisco Javier Gil, y el vicerrector académico de la Universidad de Atacama, Forlín Aguilera- explicara los alcances de los cambios que traen este año tanto la Prueba de Transición, como el Proceso de Admisión a la educación superior en general.
“Son cambios imprescindibles que demoraron demasiado. El camino que estamos emprendiendo va en la línea correcta, en un sistema que ya no tiene que resolver tanto el problema de una gran cantidad de postulantes para pocas vacantes; hoy la clave está en asignar a los postulantes a cupos que ya no son tan escasos, excepto en las carreras más demandadas”, enfatizo Leonor Varas.
En ese sentido, la experta destacó modificaciones como la posibilidad de postular a la educación superior para quienes estén en el 10% de mejor rendimiento de sus colegios de egreso, más allá de si logran o no 450 puntos promedio entre las dos pruebas obligatorias (Matemática y Comprensión Lectora).
Varas recalcó que la idea final de este proceso de cambios es que a la educación superior acceda mayor diversidad de personas, ocupando la herramienta de las pruebas, pero también el Ranking, el NEM y los programas especiales de admisión que han establecido varias universidades. “Queremos que a la educación superior ingrese mayor diversidad de gente, no sólo los que sacan un buen puntaje en las pruebas. Hay otros indicadores que son efectivos para determinar si alguien va a ser o no buen alumno en la universidad. Creemos firmemente que no hay excelencia si no hay diversidad”.
También destacó los cambios que se están implementando paulatinamente en las pruebas, que irán midiendo cada vez más conocimientos básicos (aquellos que a todos les hayan pasado en educación media), pero sobre todo competencias, la capacidad de aplicar esos conocimientos base en situaciones prácticas y más cotidianas.
“Las nuevas pruebas, que se aplicarán completamente en el proceso 2023, han sido probadas en más de 9.000 alumnos y hemos comprobado que reducen las brechas en educación. La tarea es que esa disminución se mantenga eliminando otros factores, como las diferencias en el entrenamiento al que algunos jóvenes acceden y otros no”, agregó la autoridad del DEMRE.